miércoles, 14 de octubre de 2009

Sueño corto-surrealista-con-calambre o Cuento breve con final feliz.

Un joven apuesto pero con cabeza de manzana era la atracción principal de la feria de las curiosidades, un evento en donde se congregaban gentes (sí, gentes) de lo más extrañas, dedicadas a las más disparatadas actividades que pueda uno imaginar, tales como un concurso de resbalones, o el ya tradicional encuentro regional de raspones con figuras atrevidas, sin mencionar el torneo de deslizamiento en traje de baño sobre asfalto (demonios, ya lo mencioné).

En los puestos de comida había señoritas particularmente obesas que vestían provocadoramente y se embarraban unas a otras con aceite para bebé. En las bebidas había un ejército de científicos que desarrollaban complejas fórmulas para lograr cumplir con la intensa demanda de cerveza hervida e hirviendo (he ahí lo complejo) para todo el público. El toque final lo daban los hombres lunar-peludos, que como su nombre lo indica, ostenataban sendos lunares peludos, todos ellos (los hombres) enfundados en un leotardo con la bandera de Estados Unidos.

Todo marchaba de las mil maravillas hasta que llegaron los municipales, encabezados por un agente del departamento de protección civil, exigiendo les mostraran la licencia de funcionamiento, situación en extremo incómoda, ya que nada ahí funcionaba correctamente, ni apegado a derecho, lo cual provocó que un héroe de antaño intentara suicidarse en un cementerio de los alrededores, sin mucho éxito, debido a la compleja numerología de su fecha de nacimiento. Como era de esperarse, toda la multitud se enardeció al ver salir victorioso, una vez más, a un inútil pero gran, gran final feliz.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me gusto